José Lage: “Los ganaderos hemos evolucionado en los últimos años en un 300%, pero la industria láctea nos paga lo mismo que hace 15 años”

En julio de 2019, dos asociaciones de empresas lácteas (AELGA y GIL), y las principales industrias lácteas que operan en España (PASCUAL, CAPSA que actúa bajo la marca CENTRAL LECHERA ASTURIANA, DANONE, PULEVA, LACTALIS, NESTLÉ, y, CELEGA, entre otras), fueron sancionadas por prácticas anticompetitivas entre 2000 y 2013.  

En esta entrevista, que forma parte de la serie que desde ESKARIAM estamos publicando para dar voz a un sector en declive y sometido a presiones por parte de las industrias lácteas en España, Lage cuenta la situación que viven los ganaderos productores de leche en Galicia.    

“Los ganaderos no tenemos manera de negociar nada, ni contratos, ni precios, ni la industria láctea a la que vender” 

José, cuéntanos un poco tu historia como ganadero y la de tu granja. 

Llevo desde antes de 1995 trabajando como ganadero. La granja antes estaba a nombre de mi madre. Tenía menos vacas y cuando empezó a crecer la explotación, mi padre dejó de trabajar fuera y se unió para ayudar a mi madre. En 2009 o 2010 yo me incorporé a trabajar con ellos, y formamos la sociedad que es ahora: Ganadería Lage.  

En los años del cártel sancionado por la CNMC (2000 – 2013) nosotros vendíamos directamente a Leche Río, con un volumen anual en torno a los 400/500 mil litros anuales. Después fuimos creciendo y en 2009 – 2010 hicimos un establo nuevo y se aumentaron la cabeza del ganado. Pasamos de tener 20 vacas a unas 180 que tenemos ahora. 

Aunque en julio de 2019 la CNMC confirmó la existencia del cártel por parte de las principales industrias lácteas, ¿era esto algo que ya se sabía entre los ganaderos? ¿Por qué? 

Sí, claro. Esto es algo que está visto en el sector lácteo. Los ganaderos venimos sufriendo las consecuencias de estas prácticas desde hace muchos años. No tenemos manera de negociar el precio de nuestro producto, ni los contratos que firmamos, ni con qué industria láctea trabajamos… Da igual con qué industria láctea esté un ganadero, es siempre la misma historia con todas.  

Entre el año 2000 y 2013, ¿qué capacidad de negociación real tenías como ganadero frente a la industria láctea? 

Cero. Siempre ha sido lo mismo, no tenemos capacidad de negociar nada. Puntualmente tuvimos pequeñitas negociaciones, a través de alguna pequeña cooperativa que hacíamos para tener reuniones con las industrias lácteas. Esto a veces funcionó un poco, porque no era negociar con un ganadero sino con más de 100. Pero ya se han encargado de que estos grupos apenas existan.  

¿Cómo dirías que ha afectado el cártel lácteo al desarrollo del sector ganadero en Galicia, y al de tu granja en particular? 

Ha afectado considerablemente, aunque en aquella época no teníamos la misma producción que tenemos ahora. Pero cuando tienes un abuso, te están quitando 1, 2, 3 céntimos; te los quitan todos los meses, y al final es aguantar o no. Sobrevivir o no, parece que no es nada, pero lo es todo. Jugar con los ganaderos es jugar con personas.  

Actualmente no cubrimos costes, sobrevivimos a base de créditos y préstamos, y a la industria láctea no le importa si el pienso sube, si las vacas están en mejores condiciones en nuestras granjas, si invertimos en tecnología, si tenemos granjas más sostenibles… 

En ese sentido, ¿cómo ha evolucionado el sector ganadero a nivel costes / producción / innovación / tecnología, etc.?  

Los ganaderos hemos evolucionado en los últimos años un 300% a nivel confort de nuestros animales y las granjas en general. Contamos con increíbles sistemas de alimentación, sometimos a un gran cuidado a nuestro producto, la leche, hemos instalado robótica en nuestras instalaciones que nos ayuda mucho a tener datos de cada animal, contamos con la maquinaria adecuada para trabajar…  

Cada vez hay mayor exigencia por parte de la industria láctea, la Xunta, la administración, Sanidad…, y nosotros cumplimos e invertimos en lo necesario; pero hace 30 años que el litro de la leche se pagaba al mismo precio que ahora. Invertir en 2 robots para mi granja supone una inversión alrededor de 300.000 euros. Es insostenible. Los ganaderos no podemos más.  

El nivel de profesionalidad de las granjas es ahora mismo top, contamos con unas cualidades de eficiencia de sobresaliente, pero en las industrias no se refleja lo mismo. Nos queda mucho por mejorar, pero ellos no reflejan nada. Para seguir mejorando tenemos que tener una solvencia, pero no la tenemos.  

La industria láctea hace 50 años que se dedicaba a meter leche en un tetrabrik, y sigue igual. No ha evolucionado nada. Hay que hacer derivados, hay que innovar, pero no puedes seguir haciendo lo mismo, tener los beneficios que ellos dicen de miles de millones, y tener así a los ganaderos. Nos estamos arruinando para sobrevivir a base de créditos.  

¿Exageran los ganaderos cuando se quejan de que no cubrís costes y la industria láctea no quiere pagar más?  

Como digo, nuestros costes son cada vez más elevados y lo que nos pagan es lo mismo que hace 20 años. Todas esas mejoras cuestan dinero. El 90% del trabajo en las granjas los hacemos nosotros, somos eficientes; las vacas apenas enferman porque gastamos mucho en prevención antes que en curar.  

Tenemos más problemas que el precio de la leche, si te pagan más tendrás una recuperación económica; pero eso no quiere decir que no haya otros problemas. Por ejemplo, ese monopolio del que hablaba, que como empresarios no podemos decir nada en la negociación de un contrato, y tenemos que firmar que estamos cubriendo los costes de producción cuando no es así. ¿Dónde está la administración para velar por nuestros derechos? Firmamos un documento sin poner un precio fijo.  

¿Cómo ves las negociaciones de contratos actuales?  

Esto tampoco cambia. La oferta y el contrato vienen en el mismo momento, siempre con el tiempo justo, cuando está a punto de terminarse el contrato vigente. A nosotros nadie nos pregunta cuáles son nuestros gastos, cómo va la explotación, si está bien planificada para ser más sostenible. Absolutamente nada. 

Así que solo nos queda aceptar lo que nos imponen, porque nuestro producto es perecedero y sino no nos recogen la leche. Si decides marcharte a otra industria láctea, hacen lo mismo. Eso contando con que quieran aceptar comprar tu leche porque hablan entre ellas y tienen acuerdos para no quitarse ganaderos. No puedes marcharte.  

Todo esto sigue sucediendo. Hay maniobras que no son normales, y los ganaderos no tenemos armas. Llevamos años protestando y explicando todo a la administración, pero lo único que recibimos son cuentos chinos. Hemos tenido reuniones y siempre dicen que toman nota, pero no se soluciona nada. Dónde están los que protegen los derechos de los ganaderos, incluso el de los consumidores. Aquí hay un monopolio formado por las industrias lácteas al que la administración no presta atención. No tenemos acceso ni nos dejan hacer nuestras propias facturas, ellos lo hacen todo porque les interesa.  

¿Cómo se encuentra actualmente el sector lácteo a nivel general? 

Se encuentra igual que hace 10 años. Seguiremos siendo menos, se cierran muchas explotaciones. El problema es que esto no afecta solo al sector ganadero sino a todos los sectores indirectos. 

Una granja grande de 200 cabezas de ganado tiene 20 tractores, y eso requiere apoyo del taller de la comarca. 50 ganaderos tendremos 50 granjas, y más trabajo para toda la comarca y la región. Esto va a terminar con más sectores, no solo con el sector ganadero, es una cadena. Hay muchos puestos de trabajo directos e indirectos, pero la administración mira todo de lado.  

El campo se arruina y la gente ya no quiere quedarse en el campo con estas condiciones. Pero en zonas como Galicia no puede faltarnos el campo. 

¿Cómo se explica que España compre leche en el extranjero a un precio superior y miles de ganaderos tengan que cerrar sus explotaciones? 

No es fácil explicarlo. Nos dicen que tenemos que cobrar la leche más barata en Galicia porque estamos lejos de los puntos de venta de las grandes ciudades. De Galicia a Madrid hay 500 km, pero luego te traen cubas de Francia, lo procesamos aquí y lo lleva a Madrid. Entiendo que esa leche sea más cara. Pero sentido no tiene.  

Sin duda eso repercute en la calidad de la leche que bebemos, es inviable que sea la misma leche.  

¿Qué supondría para ti recuperar lo que la industria láctea os quitó injustamente a través del cártel sancionado por la CNMC?  

Las indemnizaciones, cuando lleguen, llegarán ya tarde, porque por desgracia han cerrado muchos ganaderos porque no afrontaban costes, otros lo estamos pasando verdaderamente mal. Está claro que mejor tarde que nunca. Y si esto sirve para que sigan adelante muchos ganaderos, me alegraré.  

Espero que sirva para poner un punto y final y para empezar a valorar el sector ganadero, el trabajo que hacemos y nuestro producto. Ahora mismo no se valora nada y por eso solo tenemos imposiciones. Esperamos que eso cambie.  

¿Creéis que la industria láctea continúa presionando a los ganaderos para no reclamar o para no hablar de la situación en la que está el sector a causa también del cártel? 

No lo sé, he oído algo, que hay industrias que parece ser que han tratado de amenazar, pero no me consta personalmente. A mí nadie me ha llamado ni me han dicho nada.  

¿Qué le dirías a todos aquellos ganaderos que se han visto afectados por el Cártel de la Leche, muchos de ellos teniendo que cerrar sus explotaciones y que todavía no han reclamado? 

Simplemente digo que como persona debemos ejercer nuestros derechos. Si es nuestro dinero, se debe reclamar. Ha habido muchos ganaderos que por miedo a represalias han podido quedarse descolgados, sobre todo si siguen trabajando con la misma industria láctea que en los años del cártel, y quizá tengan miedo. Yo entiendo que todo el mundo debería reclamar lo que es suyo.  

¿Eres optimista en la resolución a nivel personal?  

Optimista tengo que ser porque me gusta ser positivo. Creo que los ganaderos somos optimistas y positivos porque si no ya habríamos cerrado. La moral está cada vez más baja en el sector ganadero. Crees que ves la luz, pero la luz no llega nunca.  

Si hay justicia tendrá que salir adelante este caso en la Audiencia Nacional, porque el cártel ya se ha demostrado por parte de la CNMC.  

Los ganaderos teníamos menos miedo a expresarnos, pero ahora somos más liberales y hablamos más de lo que pasa en el sector. Tenemos más medios, somos gente profesional. Ahora nos hacemos ver más, antes teníamos menos medios, menos recursos, más miedo…  

¿Crees que la confirmación de este cártel de la leche será una oportunidad para cambiar lo que no funciona del sector y mejorar vuestra situación? 

Si esto se resuelve porque tenemos la razón y es un dinero que es nuestro porque nos lo han robado, espero que sea un avance y un cambio. Hay cierto miedo, porque las industrias lácteas multadas son muy poderosas y hay muchos intereses detrás.  

Veremos si no hay represalias después en bajadas de precio, porque estamos acostumbrados a todo, que al final seamos nosotros los que paguemos nuestras propias indemnizaciones. Esto es una cadena, hay que velar por la justicia de los ganaderos y de toda España, porque esto repercute en todos.  

Personalmente quiero darle ánimo sobre todo a los jóvenes, pedirles que no se vayan del campo. Es algo que hemos heredado de nuestros padres y cada día cierran más explotaciones, hay menos gente que quieran incorporarse a este sector… La gente de Galicia tiene que abrazar nuestros valores y principios, y pensar que la administración y la Justicia van a velar por nuestros intereses y los de todos los españoles. 

*ESKARIAM no se hace responsable de las opiniones vertidas en esta entrevista.